Y el que este libre de culpa que...

arroje la primera piedra, esa frase tan escuchada y escrita, gracias a que esta asentada en la biblia, que es palabra de Dios y por eso ha sido muchas veces repetida;  que enseña la metáfora "que también tengo errores, que también soy responsable, que no estoy libre de culpa, que también tengo pecados que...", entonces me queda claro que no puedo ni debo juzgar a los demás por lo que se o creeo saber, porque no siempre se conoce a profundidad al otro, es tan fácil decir lo que se piensa, decir lo que se cree que esta mal porque, pero cuantas veces no somos capaces de revisar lo que es uno; muchas veces no se logra la profundidad en la comunicación y menos el saber lo que contiene cada individuo, que sucede en el interior, esto se debe a que nuestras relaciones a veces son superficiales, no se llega a concretar  el interior del otro, porque a veces no se establece la prioridad de mantenernos en contacto con quienes nos rodean, con quienes forman parte de un vínculo consanguineo o social, muchas veces nos falta tiempo -canta Susana Zavaleta- para permitirnos conocernos, para permitirnos saber, descubrir lo que el otro ¡sabe, quiere, ama, odia, enfrenta! -nos hizo falta tiempo- para poder demostrarnos lo que somos capaces de hacer, el poder disfrutar (porque no siempre lo hacemos) los elementos de la naturaleza, el gran amor que los demás nos pueden prodigar, ahora se mezcla la voz de Manzanero y (suspiro) escucho la profundidad de su canción, el no darle la prioridad a lo que tenemos, a lo que nos rodea, porque no queremos darnos cuenta que esta ahí (los amigos, la familia) la felicidad; nos hace falta tiempo para demostrar lo.... y han pasado ya 5 meses casi 150 días en que Moy esta en esas cuatro paredes, en ese lugar donde la oscuridad puede matar el alma del hombre, donde el aislamiento puede hacer sucumbir al más fuerte de los hombres en la desesperación y la locura, ese lugar en el que un ser puede transformarse, hoy sigue en espera de que sea absuelto por lo que no hizo (creo en él), por lo que la ley lo eximiría, pero que el hombre lo condena por su condición de juzgador y por considerarse superior por ser el que esta por sobre los demás es el que aplica la ley a diestra y siniestra, a consideración a conveniencia; ¿será culpable, lo habrá hecho, seria capaz? no me toca a mi juzgarlo, porque no tengo los elementos para hacerlo y aun si los tuviera no soy yo quien debe sentenciar, ni etiquetar, solo se que su sinceridad es mucha y lo menos que puedo hacer es acompañarlo en su silencio, en su desesperación por gritar y decir ¡no soy capaz, no fui capaz!, sigue avanzando el tiempo, sigue consumiendole días a su libertad a la oportunidad de ser mejor ser humano, sigue perdiendo la oportunidad de seguir evolucionando como un ciudadano que quiere mejorar su condición social y personal a partir de un cumulo de decisiones, de acciones que van arrastrando al circulo de la clasificación de ser ¡una buena o mala persona! (según quien nos analice o juzgue el otro) dependiendo del comportamiento que tenga con quienes me rodean; después de 12 años de conocerlo, de ver su evolución, de esas conversaciones que teníamos que a veces las convertía en un monologo, ya que construía su muro de silencio y que algunas veces logre penetrarlo, hoy estoy a la espera de que salga, de que pueda ver la luz de la libertad, que pueda sentir que la naturaleza lo abraza y traspasa la indiferencia, lo espero para poder seguir compartiendo el mejor momento que puede tener el hombre "su libertad"; algo que aprendí con Zorbas es que cada individuo tiene la capacidad de hacer lo que le plazca, de viajar a donde desee (sobre todo a su interior) y que la decisión que tomé le permita ser "salvajemente LIBRE".... estoy aquí en espera de poder hacer realidad esta conversación ante un café....
Mientras espero, mientras veo como pasan los segundos, mientras la esperanza de que Moy salga, oigo esta pieza que me hace un nudo en la garganta... deseando que su alegria de vida no se convierta en una profunda tristeza....
http://www.youtube.com/watch?v=izQsgE0L450

La promesa....

Hace mucho tiempo que leí a Luis Sepúlveda, en  la novela en la que un gato y una gaviota hacen mancuerna, pude esbozar de nueva cuenta una sonrisa ante las letras de este escritor, que me llevó a las orillas del mar, de transportarme ante las patas de Zorbas y la loca promesa ante una gaviota, ¡si! el poder enseñarle a volar a una gaviota, si se lee complejo por la condición del felino ante un ave y su tendencia a convertir a la segunda en alimento; en esta historia no fue así, ya que Zorbas aceptó la encomienda que le pedia una gaviota debilitada, moribunda, que  tres promesas, el poder darle la oportunidad a su su hijo para pudiera nacer, crecer y aprendiera a volar, para que a través de el pudiera continuar la ruta que dejo inconclusa por que las circunstancias no le permitieron continuar, si Kengah "la gaviota madre" que se sumergió al mar para pescar un arenque y reponer fuerzas para seguir su viaje desde el río Elba hasta el Canal de la Mancha.... un libro interesante donde se humaniza a los gatos, ratas, gaviotas y hasta un chimpance, que tiene como intención mostrar lo valioso de los valores, pretende que el lector realice un viaje a su interior y de cuenta de la importancia de sus acciones, el poder cumplir con la promesa hecha a otro y que se hace a sí mismo, el establecer la solidaridad y compañerismo para hacer participes a los demás del reto más importante que puede tener un ser humano el ser honesto consigo mismo y responsable por la decisión que tome, el que dependemos de las decisiones de otros para poder ayudar, el que la perfección no es una condición para superar las dificultades y que las diferencias no son limitantes para no alcanzar las metas; la novela de Luis me llevo a al inicio en creer que Zorbas (el gato negro) por su condición de felino, depredador, podría dejar a un lado lo que prometió para poder satisfacer su instinto, pero no todo es como parece.

Un nuevo cambio...

A partir del 1° de septiembre, Jaime deja de ser el subjefe de planeación de la subdirección, hoy emprende un nuevo proyecto el cual lo absorberá en demasía, va a estudiar el ¡DOCTORADO! en la UCI; a las 15:30 del 3 de septiembre nos convoca para poder despedirse del que fue su equipo de trabajo por 6 años, da las gracias por el apoyo y atención que recibió de cada uno de nosotros y sobre todo el abrazar a cada uno, hoy inicia un proyecto que durará 2 años, en el que tendrá que leer y releer todo lo que haya de educación, enfrentar retos sobre los alcances de la educación en la sociedad y los cambios que son necesarios para su mejora, si ¡es un reto muy grande al que se ha comprometido para su bienestar y su necesidad de crecer y ser mejor! hoy se ha desprendido de todo lo que lo ataba a su oficina... hoy ha ¡quemado las naves! para poder partir a un nuevo reto, que dio inicio hace 3 días, y que tomará en sus manos a partir de que traspasa las rejas de la Subdirección, hoy lo ha hecho, ¡Exito! ante lo desconocido pero que eres capaz de lograrlo.